Tanto un médico como un farmacéutico pueden ponernos al corriente sobre los diferentes medicamentos para dejar de fumar de venta en farmacias y la mejor manera de utilizarlos.

Actualmente, en España existen ocho tratamientos para dejar de fumar. Cuatro de ellos son medicamentos sin receta para dejar de fumar y los cuatro restantes, pastillas para dejar de fumar que requieren de receta médica poder adquirirlos en la farmacia.

 

Medicamentos sin receta para dejar de fumar

 

Los medicamentos sin receta para dejar de fumar se incluyen dentro de los tratamientos de reemplazo de la nicotina (TRN) y son productos que proporcionan nicotina de manera regular, reduciendo la dosis poco a poco, minimizando los síntomas de abstinencia y ayudando al paciente a mitigar la dependencia.

 

Chicles de nicotina

Liberan nicotina al masticarlos. No deben masticarse continuamente, sino morderlo lentamente y colocarlo entre la mejilla y la encía cuando no se esté masticando. A los treinta minutos hay que tirarlo. Se puede tomar un chicle cada 1 o 2 horas, hasta un máximo de veinticuatro chicles al día.

El tratamiento dura entre ocho y doce semanas, en las que iremos reduciendo el consumo de manera gradual.

 

Parches de nicotina

Expulsan nicotina a través de nuestra piel. Es recomendable colocarlos siempre a la misma hora, una vez al día y en una zona sin pelo, entre la cintura y el cuello.

Los hay de 24 y de 16 horas (hay que llevarlo mientras estemos despiertos) y el período del tratamiento está entre las ocho y las doce semanas, reduciendo el consumo de manera gradual.

 

Pastillas de nicotina

Desprenden nicotina al disolverse en la boca, y no deben tragarse ni masticarse. Se colocan entre la mejilla y la encía, y se succiona hasta que desprenda su sabor.

El consumo es a demanda, con un máximo de treinta pastillas al día y una duración máxima de doce semanas, reduciendo el consumo de manera gradual.

 

Spray bucal de nicotina

Trabajan mediante la pulverización de nicotina debajo de la lengua (sublingual), sin tragar saliva ni inhalar su contenido (no debe entrar al tracto respiratorio).

La dosis máxima recomendada es de cuatro pulverizaciones al día y el período de tratamiento es de dos a tres meses, reduciendo la dosis periódicamente.

 

Estos medicamentos para dejar de fumar requieren que el paciente deje de fumar mientras los use, no superar el tiempo señalado para el tratamiento y no combinar a la vez chicles, parches y comprimidos para chupar.

Lo más adecuado es consultar con un profesional sanitario antes de consumir cualquiera de estos medicamentos sin receta para dejar de fumar, y asesorarnos sobre la mejor alternativa para nuestro caso particular.

 

Medicamentos con receta para dejar de fumar

 

Los medicamentos con receta para dejar de fumar, son pastillas para dejar de fumar que no contienen nicotina y exigen un seguimiento médico.

 

Bupropión

Pastillas para dejar de fumar que disminuyen las ansias de consumir tabaco y reducen el síndrome de abstinencia. Actualmente, es la única pastilla para dejar de fumar financiada por la seguridad social.

Requieren dejar de fumar durante la primera semana de tratamiento, que durará entre siete y doce semanas.

 

Citisina

Pastilla para dejar de fumar de reciente comercialización en España, cuyo principio activo es un alcaloide vegetal extraído de las semillas de un árbol del género Cytisus laburnum.

Reduce y bloquea los síntomas del síndrome de abstinencia, evitando recaídas e incluso la sensación de satisfacción al fumar.

El tratamiento dura veinticinco días, comenzando con seis pastillas diarias y reduciéndolas gradualmente.

 

Nortriptilina y Clonidina, se utilizan cuando los medicamentos de primera línea no funcionan.

Varencilina, retirada del mercado el pasado 2021 por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS).

  

Factores a tener en cuenta para dejar de fumar

 

Dejar de fumar no es fácil, sólo un 5% aproximado de las personas que lo intentan, lo consiguen.

Seamos conscientes de que las terapias para dejar de fumar no garantizan, por sí solas, que vayamos a dejarlo para siempre.

Si realmente quieres dejar de fumar definitivamente es imprescindible la intervención de tu fuerza de voluntad, tu determinación, el asesoramiento de un profesional sanitario y, probablemente, el apoyo de pastillas junto a algún otro tratamiento de reemplazo de la nicotina (TRN).

Cualquier adulto, excepto mujeres embarazadas o en período de lactancia y adolescentes, puede utilizar los distintos medicamentos para dejar de fumar disponibles actualmente en el mercado.