Cuando nuestros niveles de vitamina k no alcancen las cantidades recomendadas, una buena elección es recurrir a los suplementos de vitamina k que encontraremos en la farmacia.

La vitamina k es un nutriente que tiene funciones esenciales en nuestro organismo, como la calcificación de los huesos o la correcta coagulación de la sangre.

La deficiencia de vitamina k, puede darse en personas con trastornos hemorrágicos, que siguen tratamientos con anticoagulantes, antibióticos, anticonvulsivos, secuestradores del ácido biliar, personas que siguen dietas bajas en grasa o en alimentos con vitamina k, aquellos que sufren la enfermedad de Crohn o personas celíacas.

 

¿Qué tener en cuenta al tomar suplementos de vitamina k?

 

Antes tomar suplementos de vitamina k es importante considerar aspectos como:

  • Su absorción: las vitaminas solubles en grasa (liposolubles), como la vitamina k, dependen de ella para que el cuerpo las absorba adecuadamente. Es por ello que los profesionales sanitarios recomiendan tomarlas con alimentos o bebidas que contengan grasa.
  • Como, en la mayoría de los casos, obtenemos suficiente vitamina k a través de las comidas, no es recomendable tomar suplementos con dosis altas de vitamina k. Debemos conocer la cantidad de vitamina k que contiene el suplemento y compararlo con la ingesta diaria recomendada.
  • El precio del suplemento y si cuenta con las certificaciones de calidad
  • El formato en el que se presenta el suplemento, para escoger aquel que mejor encaje con nuestros gustos y costumbres.
  • Los medicamentos que tomamos, pues algunos de ellos pueden interactuar con estos suplementos. En caso de seguir algún tratamiento farmacológico, consultemos con el médico antes de usarlos.

  

Tipos de suplementos de vitamina k

 

Las vitaminas k1 y k2 cumplen diferentes funciones. Por lo que, antes de comprar suplementos de vitamina k debemos tener claro el uso que le vamos a dar.

Los suplementos de vitamina k1 sirven para apoyar el proceso de coagulación sanguínea y prevenir enfermedades cardiovasculares.

Los suplementos de vitamina k2, protegen nuestra salud ósea y previenen enfermedades cardíacas.

En el mercado encontraremos diferentes formatos para la presentación de suplementos de vitamina k:

  • Vitamina k por vía tópica: que puede sernos de utilidad cuando nuestra irrigación sanguínea aumenta: morados, ojeras, rojeces, inflamaciones, venitas bajo la piel o tras pequeñas intervenciones (nunca en heridas abiertas), por las funciones esenciales de la vitamina k en la coagulación de la sangre.
  • Vitamina k por vía oral: que puede presentarse en forma pura o mezclada con otros nutrientes, como cápsula, comprimido, perla o en forma líquida.

Cuando optemos por suplementos de vitamina k mezclados, sepamos que:

  • Si nos cuesta asimilar la vitamina k, podemos optar por suplementos que combinan vitamina k1 con vitamina k2.
  • Apostar por la vitamina d y k juntas puede ser muy provechoso para personas que necesiten fortalecer sus huesos.
  • Así como la vitamina k1 es de origen vegetal, la vitamina k2 es, mayoritariamente, de origen animal. Pero, los veganos pueden encontrar suplementos veganos de vitamina k2 procedente del natto. Y, si quieren comprar capsulas, las pueden encontrar cubiertas con celulosa vegetal.

 

Contar con niveles adecuados de vitamina k en bebés, niños y adolescentes, es imprescindible. Asegurémonos de proporcionarles la vitamina k que necesitan para crecer fuertes y sanos.

Aunque el riesgo de toxicidad de los suplementos de vitamina k es muy bajo, no es aconsejable tomar suplementos de vitamina k sin antes consultar con un profesional sanitario.